Elsa Gómez Portillo
¿Quiero comprar o renovar mi equipo fotográfico?
Un gran porcentaje de quienes empiezan en la fotografía tienen la misma pregunta «quiero comprar o cambiar mi equipo ¿que me recomiendan?». Y yo me pregunto ¿somos objetivos a la hora de dar este tipo de consejos? O solo nos dejamos llevar por lo que “Nosotros tenemos o hacemos”.
Desafortunadamente yo tuve que aprender a la mala. Mi primer cámara fue análoga con ella fueron mis primero pasos en la fotografía luego, por diversas cuestiones del destino, tuve dos cámaras ya semi-profesionales digitales, de las cuales en la primera cometí el error que muchos cometemos por dejarnos llevar por el tamaño y con esto me refiero al tamaño del lente (no sean mal pensados) y adquirí un 75-300 pues no tuve ninguna recomendación o conocimiento a la hora de comprar. Después tuve mi siguiente cámara que compre usada y que, desafortunadamente de nuevo por no tener conocimiento de cómo comprar una cámara usada, tenía un problema en el sistema de enfoque el cual luego dejó de funcionar totalmente y solo enfoca en manual sin funcionar el indicador de enfoque, con esa empecé mis estudios formales de fotografía y pues lógicamente ya quería cambiarme a una cámara que no tuviera problemas mecánicos y me anime a comprar una nueva cámara y cuál fue mi sorpresa que para lo que yo quería que era profesionalizarme en la fotografía para eventos la cámara era la menos indicada, la calidad de la imagen en el momento de subir el ISO no era la suficiente, no tenía las características necesarias para lo que yo quería. Me molesté, me frustré y creo que hasta lloré cuando descubrí esto, pero justo fue lo que me permitió descubrir la verdadera clave de cómo adquirir y cómo aconsejar comprar una cámara o equipo.
Lo resumo de la siguiente manera y sin querer sonar cursi o exagerada, para mi comprar una cámara nueva o usada se basa en lo mismo que hacemos cuando buscamos pareja, tal cual lo leen. Claro, a los que tómanos estas decisiones en conjunto la cabeza con el corazón por que el error es cuando escogemos solo con una de las dos anteriores, tenemos que buscarle hasta el más mínimo detalle que podamos encontrar y hacer un balance de pros y contras, ¿Porqué? Por qué así sabremos todas las virtudes con las que trabajaremos pero también estaremos consientes de carencias o dificultadas con la que tendremos que trabajar.
Y ahí radica la principal razón por la que no tomamos la mejor decisión, solo buscamos todas las virtudes pero muy poco escudriñamos en sus defectos o carencias.
Ahora a lo largo de esta búsqueda, decepciones y de leer mucho he aprendido lo siguiente: debemos hacernos las siguientes preguntas, ¿quiero tomar fotografías? Si tu respuesta es positiva, entonces respondámonos lo siguiente «¿Quiero tomar fotografías de forma profesional o solo como un hobby?» Si te decides por lo profesional, hay que averiguar las gamas de cámaras que ofrece el mercado.De igual forma si es como hobby, pues en dado caso no voy a comprar una cámara de miles de dólares si la voy a tener guardada. Ya estando dentro de cada gama o categoría de equipos, debemos investigar bien las ventajas de cada marca al igual que sus desventajas, algo muy importante ya sea profesional o hobby es preguntarte esto: ¿que tipo de fotografías quiero hacer? paisajes, social, retrato, comercial, moda, macro, nocturna, deporte, periodística, etc. Digamos que este es otro filtro y así se nos van reduciendo las opciones.
Luego de hacerte las preguntas anteriores viene una de las más difíciles; el presupuesto con el que contamos. Te recuerdo que es un decisión de cabeza y corazón no solo de una de las dos, y dentro de cada gama también hay variedad de precios y ahí podemos hacer un balance de lo que se acoplan a nuestras expectativas pero también a nuestros bolsillos.
Y la última pregunta la cual se aplica más a los lentes u objetivos es; ¿realmente lo necesito? ¿cubre la necesidad que quiero cubrir? esto es muy importante a la hora de adquirir equipo, muchas veces nos dejamos llevar por la ilusión y no analizamos a fondo lo que queremos hacer con este equipo o si realmente lo vamos a usar y le vamos a ver el beneficio a la inversión.
Ya sé que muchos estarán pensando en un dicho muy famoso en el gremio de los fotógrafos que cita así “No es la flecha, es el indio” y estoy completamente de acuerdo con esto , muchos «fotógrafos profesionales y rock stars” compran equipos sumamente costosos de miles de dólares y ya con eso creen que se las pueden de todas todas y no es así, de nada sirve un equipo de esas magnitudes si ni siquiera saben para que sirven todos los botones. No se trata de que el equipo es el que hace al fotógrafo, si no de que esta decisión para quienes amamos la fotografía es una decisión de vida y que no nos frustremos por haber tomado un mal camino por ignorancia, en adquirir algo que al final no era lo óptimo para lo que yo quiero realizar, por qué a muchos nos toca hacer sacrificios y apretarnos para poder adquirir un equipo y lo menos que queremos es con toparnos con malas decisiones.
«Elsa Gomez» <info@elsagpfotografia.com>